SENTIDO GENERAL

   Es la historia de cómo se posibilita un nuevo comienzo después de una destrucción. La película narra la misión de un iniciado, consistente en el sostenimiento de la Verdad, gracias a cuyo cumplimiento lo que parecía perdido puede volver a empezar, garantizando así la victoria final del Espíritu. Por tanto, es la historia de la continua renovación.

ELI: El Caminante, o sea, aquel que holla el Sendero Espiritual. Gran iniciado y gran servidor. Su nombre significa “el sublime”. Actúa como Avatar de un nuevo ciclo al preservar y transmitir la Enseñanza. Es un Moisés. Es un instructor. Se convierte en la Enseñanza, o sea, la Realiza. Es ciego porque el mundo no le engaña, puesto que está guiado por la voz interna, que le reveló la localización del libro; es por tanto, la Voz del Silencio, la Voz de su Presencia Yo Soy, o del Cristo Interno, o incluso de su Maestro. 

   Su condición de caminante aporta al personaje un carácter evolutivo, perfeccionador. Su vida tiene un propósito definido, una meta elevada y encarna la obediencia iluminada que le lleva a continuarla a pesar de las condiciones difíciles que vive. Ser ciego es no solo un símbolo de ser guiado por la voz interna, sino también una condición que cualquiera podría usar como excusa “valida” para no llevar adelante una misión tan importante. Con Dios no hay límites: eso es lo que enseña.   

LIBRO: el Conocimiento Espiritual. Queda donde puede ser usado y transmitido adecua­­damente, (Claudia) porque no está manejado por la mano humana sino por la Divina que coloca todo en Orden Divino Perfecto. 

SOLARA: discípula y continuadora de la obra. Representa la redención de su madre, Claudia.

CLAUDIA: discípula y futura instructora. Está preparada para acceder a la Enseñanza y por eso le llega a ella. Forma parte del plan de salvación aunque al principio no es consciente de ello. Al principio es una discípula caída ya que estaba dominada por el mago negro, pero la presencia de Eli de da la oportunidad de ser aspirante. 

CARNEGIE: la fuerza siniestra. Es consciente del Poder Divino pero lo quiere obtener por egoísmo, para su uso propio. No transmitía lo que conocía porque sabía que si solo él tenía el conocimiento podría dominarlos a todos, por el miedo y la ignorancia. Ve el mundo físico pero es “ciego” para el Conocimiento Espiritual, por eso aunque posee el libro no puede acceder a su contenido. 

SECUACES DE CARNEGIE: garras de la fuerza siniestra. Los que por miedo e ignorancia son dominados por el mal.

VIEJOS CANIBALES: representan la mente degradada, capaz de cualquier cosa por sobrevivir.

- A pesar de que Eli vive en el mismo mundo gris y extremo que los demás, su actitud es más digna que la de la mayoría de la gente con la que se encuentra, quienes parecen haberse vuelto casi salvajes. Esto se ve por ejemplo en que mantiene su cuerpo limpio, símbolo de pureza, y también en que escucha música y lee a diario. Además no se estanca, no se para, sino que avanza siempre, porque es un Caminante, símbolo del que evoluciona y progresa hacia su Realización Espiritual. En su avance sigue al Sol, es decir, holla el Sendero Espiritual siguiendo la guía de la Luz Espiritual. Lo que es fundamental para la vida es el Conocimiento, en todos los niveles, pero especialmente en el Espiritual. Eli no había olvidado quién era y por eso seguía adelante, con fe en Dios y en sí mismo. Y esto era porque a diario se alimentaba del “libro” aunque no siempre de pan (“no solo de pan vive el hombre”).

- Es interesante la reflexión de si continuaríamos siendo cómo somos si no tuviésemos los actuales adelantos tecnológicos. Sin comodidades nos “asalvajamos” rápidamente, con lo cual habría que plantearse si el desarrollo tecnológico coincide con el desarrollo moral. Porque si coincide, no importa que dejemos de tener “cosas”, seguiríamos siendo bondadosos. Pero si no coincide, cuando perdemos lo que nos adormece aparece el “tigre dormido” que siempre había estado allí. Así que el desenvolvimiento interno es la clave y es mucho más importante que cualquier otro adelanto.

- El primer ejercicio con el que transmite a Solara el contacto divino es la gratitud cuando bendicen la comida. Con esto, la eleva en conciencia y ella es una buena alumna porque rápidamente lo trans­mite a su madre, que también se convierte así en discípula.

- Las palabras con las que Carnegie quiere convencer a Eli de que le deje el libro son las mismas que diría un sabio: “quiero palabras adecuadas para ayudarles, quiero compartirlo y propagarlo”. Pero su motivación es otra, es egoísta, pero sabe lo que a Eli le gustaría escuchar. Esto implica que no es ignorante, porque es consciente de lo que es correcto, y por eso representa la fuerza siniestra. Igualmente lo que Carnegie dice acerca de lo que supone la Enseñanza es verdadero: “no es un libro es un arma que apunta directamente al corazón de los desesperados; harán lo que se les diga si son palabras de ese libro”. Esto significa que sabe que el Conocimiento Espiritual es alimento para el alma y la salvación de la vida. Así que Carnegie quiere usar la verdad pero con mala intención.  

- Eli está protegido. Es aquello de que cuando sirves a Dios y a Su Plan, aunque no sea fácil, todo lo que necesites lo tendrás y serás protegido. Esto también lo delata como un Iniciado, y muchos pueden percibir o intuir su grandeza, incluso algunos de los que sirven a Carnegie. Todos reconocen en él algo diferente, incorruptible. En este sentido, Eli consigue en alguna medida elevar en conciencia al princi­pal seguidor de Carnegie, por eso no puede dispararle. En ese momento se dio cuenta de la importan­cia de ese hombre y su misión, y cuando más tarde muere se arrodilla mirando al sol y tiene una señal de rendición, aunque fuese en el último momento de vida; se entregó. Si bien también tenía intenciones egoístas (quedarse con Solara que representa algo más puro) son de tipo diferente a las de Carnegie. Sigue siendo malo, pero no quería el dominio de otros sino cumplir su idea de “amor”; quizás por esto sí pudo ser influencia en algo por Eli.

- Cuando Solara cuestiona si Eli no estará equivocado en su camino, éste le responde algo muy bonito: “por fe andamos, no por la vista”; y también le explica que “la fe significa que sabes algo aunque no sabes nada”, porque no lo sabes con la mente sino con el Espíritu.

- Hay una escena parecida a la tentación de Cristo: Eli responde a Carnegie que Dios siempre es bueno, y éste le dispara para luego preguntarle “¿dónde está ahora tu protección?” Se parece a aquello de que “si eres Dios, sálvate”. Pero Eli ya es la enseñanza encarnada, así que esto no le hace dudar, sino continuar caminando. Por cierto, incluso aquí, el mal conoce la grandeza y la fuerza del bien, por eso Carnegie le pide a Eli que rece por él.

- Cuando Solara le pide que le lea le recita el Salmo del Buen Pastor, y ella reconoce su belleza, delatando así que recogió el espíritu de este Salmo. Aquí ella le pregunta si lo escribió él y primero dice que sí. En cierto sentido esto es correcto, porque una vez que encarnas el conocimiento lo haces tuyo (Yo Soy).

- Eli es misionado para salvar el libro porque tiene las condiciones humanas y divinas para llevarlo adelante.

- Eli dice que la enseñanza fundamental del libro es “haz por el prójimo más de lo que haces por ti”, o sea, el Amor.

- No importa que le quiten el libro, porque ya interiorizó el Conocimiento.

- Carnegie consigue el libro, pero en sus manos son solos letras muertas, porque no tiene la pureza necesaria que le alcance a su contenido. De hecho Claudia se da cuenta de que “huele” a podrido y asume la custodia del libro porque ella sí tiene buen corazón. Y como dijo Eli, el libro quedó donde debía quedar porque sería más útil allí, y todo el mal se destruyó. Se ve que todo siguió un orden perfecto: Claudia es ciega, puede leer el libro, y esposa del gobernante, o sea, todo “cuadrado” para que ella transmita allí la Enseñanza.

- Aunque Carnegie se lo implora, Claudia no le lee el libro: “no echéis perlas a los cerdos”.

- Sus palabras finales son muy bonitas y elevadoras:

   “Gracias por darme la fuerza y la convicción para terminar la misión. Gracias por guiarme sin vacilaciones y mantenerme decidido.

Gracias por las señales que me enviaste. Gracias por lo bueno que hice y perdón por lo malo. Gracias por darme una amiga; cuida de ella como cuidaste de mí. Gracias por dejarme descansar al fin."

- Maravilloso que al final se vea que junto a la Biblia se preservan también los demás grandes Libros Sagrados.